Smart & Green Design es una marca especializada en eco-diseño y auditoría medioambiental de exposiciones, museos e intervenciones de carácter efímero, con una metodología de análisis y diseño basada en la reducción del impacto ambiental.
Hasta hace no mucho, nuestra vida transcurría fuera de casa, y el hecho de vivir en un mini-piso no era relevante, ya que era prioritario estar en el centro de esa gran ciudad que nos ofrece las oportunidades profesionales y de ocio que buscamos. Sin embargo esto ha cambiado y, aunque queremos seguir viviendo en el centro, ahora necesitamos espacios capaces de transformarse.
La reforma de este mini-piso parte de la premisa de crear 20 experiencias domésticas diferentes en un espacio de 20 m2.
Aunque no dispongamos de metros cuadrados, queremos que nuestra habitación sea como la suite de un hotel y no un cubículo, queremos invitar a amigos a hacer pan en casa y presumir de cocina (con isla), coger una lechuga del huerto para la ensalada, sentirnos de vacaciones sin salir de casa o simplemente hacer un poco de yoga sin muebles por medio.
Uno de los cambios que ha venido para quedarse es el teletrabajo. ¿Qué pasa si todo el espacio de tu mini-piso se convierte en una oficina con todos los recursos necesarios para la jornada laboral, para luego volver al formato doméstico una vez terminemos?
Una de las claves para la reconfiguración del espacio es un mobiliario integrado multifuncional y plegable. De esta forma, nuestros 20 m2 podrán ser tanto una gran cocina, como una suite o una oficina en función de los elementos que despleguemos y ocultemos.
Sin embargo, para sentir una “transformación total”, necesitamos recursos que aporten un extra de intensidad. En este sentido, el poder evocador de algunos objetos o muebles son capaces de crear esa ilusión. Estos “gadgets”, además, no pueden ocupar mucho. Una tumbona plegable nos transportará a la playa, una estufa-chimenea, junto con un gran poster de un paisaje nevado nos llevará a una cabaña en la montaña, unas colchonetas en el suelo a un campamento y un mini huerto urbano en el centro de nuestro apartamento nos conectará con la naturaleza.
La sociedad digital y los nuevos formatos domésticos han transformado las casas en un escenario donde ser protagonistas de la película que queramos vivir en cada momento.